Septiembre es el mes de propósitos, de nuevas metas, la vuelta a la rutina, al cole y al trabajo, es el mes de retomar la dieta para deshacernos de esos kilitos de más que hemos cogido durante el verano, de apuntarnos al gym, de realizarnos alguna analítica o de ir al oculista para ver si me han aumentado las dioptrías antes de volver al trabajo. El mes que nos preocupamos por revisar nuestra salud. Y no podemos olvidarnos de cuidar nuestra salud auditiva y la de nuestros hijos.
Tras un verano de desconexión, piscina, playa y arena, y con la llegada de la «vuelta al cole», las actividades extraescolares y la rutina diaria, debemos prestar bastante atención a la audición de nuestros hijos, ya que podemos descubrir alguna deficiencia auditiva o hipoacusia, causada por un mal cuidado de nuestros oídos durante el verano o por un problema en su desarrollo auditivo.
La pérdida auditiva en niños de edad escolar suele pasar desapercibida, debido a que siempre se tiende a pensar que tienen dificultades en el aprendizaje, falta de concentración o atención. Esto es uno de los mayores problemas que existen, ya que si no conseguimos la detección precoz de la pérdida de audición puede afectar negativamente en el proceso de enseñanza y ser un obstáculo en el desarrollo cognitivo y del lenguaje del niño.
Tenemos que tener en cuenta que los niños no son conscientes de que no escuchan bien por este motivo los padres y los profesores tienen un papel fundamental para detectar la falta de audición temprana o cualquier problema de audición infantil. Existen diferentes tipos de hipoacusia y cada una tiene sus peculiaridades ocasionadas por diferentes factores. Por ello es fundamental estar pendientes de la evolución y desarrollo auditivo del niño desde su nacimiento hasta su adolescencia.
Recomendaciones :
- Estar atentos ante cualquier comportamiento extraño al escuchar un sonido o ruido que pueda representar un problema de audición.
- Observar su desarrollo cognitivo y del lenguaje en casa y en el colegio.
- Pedir una tutoría con los profesores del colegio para evaluar su aprendizaje y si han notado algún síntoma de hipoacusia.
- Evitar un uso excesivo de equipos electrónicos de música o sonidos elevados, ya que estos malos hábitos pueden dañar el oído.
- Cuidar la higiene de nuestros oídos.
- Evitar que pase frío en los oídos o que le entre agua.
- Revisar periódicamente su audición para estar completamente seguros de que todo marcha correctamente y que nuestro hijo tiene una buena salud auditiva.
Si crees que tu hijo padece algún síntoma de pérdida de audición o simplemente quieres hacerle una revisión de oídos antes de comenzar el curso escolar, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. En Auditone, estamos para cuidar tu audición y la de los tuyos. Pide cita previa llamando al 958 80 60 72 o déjanos tus datos en este enlace Contactar. ¡La primera revisión es GRATIS!